Un sacerdote yanqui tuvo un infarto y fue declarado muerto. Casi una hora después, lograron revivirlo y el religioso relató que vio al ser supremo y lo describió "como una fuente de energía con una figura materna". 
Un cura de 71 años en Massachussetts sufrió un infarto el 29 de enero y fue trasladado al hospital donde fue declarado muerto. Sin embargo, 48 minutos después y gracias a un dispositivo para desbloquear arterias vitales, los médicos lograron que su ritmo cardíaco se reestableciera.
John Micheal O’neal se despertó sin ningún daño cerebral y en perfecto estado de salud. 
El sacerdote narró su experiencia en el "más allá" y relató que pudo observar su cuerpo en la cama del hospital mientras se elevaba en forma de espíritu y se llenó de amor y una tranquilidad inconmensurable.
Además, aseguró que vio a Dios y lo describió como "una fuente de energía con una figura materna".