El Satí es una antigua tradición funeraria que se practicaba en la India, hoy en día está abolida y es considerada un crimen, en la que se incineraba a una viuda en la tumba del marido muerto.


Hay quienes sostienen que estas incineraciones en vida de las viudas eran voluntarias, ya sea movidas por la pena o la desesperación, pero también había casos en los que se les obligaba a las mujeres a morir junto al marido, ya sea a través de drogas o de pura coacción.

Las viudas que no acataban esta tradición eran despreciadas por el resto de la sociedad, además de ser deshonradas y desposeídas de toda pertenencia y derecho hereditario.

La palabra “Satí” se traduce como “piadosa” y proviene de una antigua leyenda en la que Satí que era esposa de Shivá, se tiró a las llamas tras pasar por la vergüenza de que su propio padre desprestigiara a su marido en una fiesta. Al descubrir lo sucedido Shivá mató al padre y a todos los asistentes de la fiesta en venganza de su esposa.

Esta desagradable tradición fue abolida en 1829, pero se han conocido casos después, ya sea por una creencia religiosa o por el hecho de que las viudas en la India estén desprestigiadas y deban llevar el “sari” blanco para que se las reconozca.