La policía paquistaní detuvo a dos hermanos sospechosos de canibalismo por haberse comido a un bebé cuya cabeza fue hallada en su domicilio ubicado en  Darya Khan, en Punyab, en el centro del país.

Mohamad Arif, confesó haber cocinado y comido a un bebé que su hermano exhumó previamente de un cementerio. 
La policía encontró la cabeza del recién nacido de dos días en la vivienda que compartían los dos hombres. 
Los dos hermanos, abandonados desde hace años por su familia, habían sido encarcelados en 2011 por un caso similar de canibalismo y liberados el año pasado.

En Pakistán no hay ninguna ley que prohíba el canibalismo, una práctica muy rara en este país, al igual que en el resto del mundo.